lunes, 30 de junio de 2008

Yo estuve allí cuando España ganó la Eurocopa

Pues sí amigos, el título no es para nada pretencioso... aunque quizá le falte un "al lado", pero que ya explicaré más adelante. Para el que aún esté perdido, este domingo estuve en Viena, donde, casualidades de la vida, se jugaba la final del Euro 2008 de fútbol. Pero comencemos por el principio...

La previa

Todo comienza el viernes después del trabajo, cuando me pego un paseito tras mucho meditarlo y consultarlo con mi Pepita Grillo, hacia la estación de Innsbruck. Allí, me encuentro con que al final me sale algo más barato el billete hacia Viena, gracias a la Eurocopa...

El futbolín más largo del mundo
El sábado estuve preparando mi viaje y paseando un rato por Innsbruck, donde había conciertos en las zonas para fans o Fan Zones preparadas para la Euro08. Sobre la estación pues no está nada mal, tiene sus servicios y todo eso... y el sábado estuve allí un buen rato esperando a mi tren, que al ser nocturno, salía sobre las 00:42, para llegar a viena a las 7:30 de la mañana.

Llegada a Viena

El viaje fue un auténtico infierno, porque claro, iba en segunda clase y en sillones, que aunque no eran malos, no es lo mismo que una cama. Así que habiendo dormido poquísimo, y con unas grandes ojeras, llegué a Viena para dirigirme presto hacia el Team Ticketing Point de España (para los legos, las taquillas), no sin antes haber visto el TTP de Alemania con sendos carteles de Sold Out.

La larga espera... infructuosa
Total, que llego a las taquillas, y había una pequeña cola esperando. Dos horas de espera hasta que abrieran, por si acaso quedaban entradas, aunque había poca esperanza. Cuando finalmente abren, nos dicen que nones... que sólo para recoger las reservadas y para casa. Alguno por ahí, que llevaban toda la noche durmiendo allí, se cabreó bastante y hubo momentos tensos, pero no pasó nada más. Luego a un cuarto de hora para que empezara el partido me acerqué por si sonaba la flauta, y tenían algunas entradas de reservas sobrantes de Categoría 1 (sobre los 550 €)... así que no pudo ser.

Estadio Ernst-Happel de Viena
De todas formas, por la mañana, una vez que tenía todo el tiempo del mundo hasta la hora del partido, me fui a conocer un poco más la ciudad, puesto que ya había estado en ella pero no la había visitado demasiado. Así que ni corto ni perezoso me dirigí hacia el estadio de Ernst-Happel, a ver qué se cocinaba por allí. Mucha peña intentando conseguir entradas, y puede que revendiéndolas también... Después de darme una vueltecita por el tinglado, se me ocurre la genial idea de seguir un cartel que me llevaba a una estación de metro que estaba a "15 minutos"... pues sería en coche, porque lo que es andando no veas la paliza. Eso me mató bastante, pero bueno, seguí con mi plan previsto de visita de la ciudad.

Detalle de la fachada y tejado de Stephansdom
Mi siguiente parada fue el centro neurálgico de Viena: Stephansplatz. Allí pude visitar la catedral gótica de San Esteban, preciosa por dentro y por fuera, y atestada de gente, principalmente por fuera. Alemanes y españoles por doquier con cánticos y cerveza en mano preparándose para el partido. Y algún que otro personaje:

Su falta de fé me resulta molesta
Dentro de la catedral había misa, así que fui a dar una vuelta por la zona, viendo a la cantidad de aficionados de ambos paises (bueno, y austriacos también había... que por cierto animaban sobre todo a España), y a comprarme un poco de comida típica para almorzar: ein würst und ein bier. Que sanos estos austriacos jajaja.

Charanga de alemanes donde también tienen cabida los españoles
En fin, después de la comida, decidí visitar el interior de la catedral, el cuál también es precioso, y seguidamente hice un intento de encontrar entradas de nuevo... como todo hijo de vecino estaba haciendo en Viena ayer. Aunque alguno estaba incluso algo "desesperado"...

(please only women)
Una vez hecha la visita de rigor, infructuosa por supuesto, me dirijí ya al FanZone de Viena... Una extensión bárbara entre el ayuntamiento y el teatro totalmente vallada con más de 10 pantallas gigantes, montones de puestos de bebida y comida, tiendas, y por supuesto... gente a mansalva. Cuando empezó el partido de hecho no cabía un alfiler.

Fachada principal del ayuntamiento de Viena
Además el paraje era chulísimo, desde el ayuntamiento al parlamento, pasando por el palacio imperial. Aproveché además para comprarme un set de aficionado españolito (R) que consistió en una camiseta no-oficial de la final pero que está chula (10€), una bufanda oficial de españa (15€), y una gorra de la sede de Innsbruck de la Euro (15€). Para todo lo demás...

Bonus: JM con todo el equipo... Sólo faltásteis vosotros!
En fin, que ya ataviado con toda la parafernalia que me identificada como Spaniard, y no sin antes intentar por tercera vez conseguir una entrada de última hora, me busqué mi huequito para cantar el gol de Torres como el que más (con varios austriacos mirándome raro) y con cánticos y moviendo la bufanda al viento. Me costó trabajo encontrar españoles entre tanta gente, pero alguno encontré y me uní a ellos. Y la fiesta fue completa... se acabaron los malos augurios. No sólo pasamos de cuartos, sino que ganamos el campeonato!!!!!!!!! Después de botar un rato, me fui para coger mi tren nocturno de vuelta para ir a trabajar. En fin, un fin de semana de campeonato, que lo tuvo casi todo para ser perfecto.

¡CAMPEONES!
Sólo faltábais vosotros.

jueves, 26 de junio de 2008

Mi vida en la oficina

Otro día más por aquí reportando. Hoy me han preguntado desde Sevilla que qué tal estoy, cómo es la oficina y todo eso. Por ello, voy a aprovechar para enseñar alguna fotito más de mi oficina en Innsbruck. Trabajo en el campus universitario de la calle Technikerstrasse, en el edificio del ICT. La verdad es que por fuera el campus no es ninguna maravilla de la arquitectura. Se ve que tiene sus años.


Dentro de la oficina se está bastante bien. Además como la temperatura acompaña, no hay necesidad de aire acondicionado. De hecho no hay. Aunque bien mirado, hace un pelín de calorcillo. El STI, que es donde yo trabajo, tiene unas cuantas salas en el edificio, porque son bastante gente. Las salas son amplias, para 10 personas, pero con bastante holgura. Vamos, mi mesa prestada es una L que viene a ser de 2x2 metros. Grandes ventanales con increíbles vistas a la montaña y con un sistema automático de bajada de persianas que funciona demasiado bien.


Pero lo mejor no es esto, lo mejor son los offices que hay en el edificio, o como lo denominamos nosotros por el departamento las "salas de esparcimiento". Totalmente equipados con cafeteras, neveras, microondas, lavavajillas... y sí... lo que estáis viendo también.


Ni que decir tiene que en las salas de investigación, hay también sofás, y alguna otra cosa rara más para echar el rato. El único problema que tiene el edificio es que las puertas pesan un quintal y son de seguridad... así que no me puedo ir el último o me quedo encerrado xD Bueno, esto el lunes se arreglará.


En fin... que en breve marcho para mi apartamento, a ducharme y prepararme para el partido de esta noche... espero que deje de llover porque ahora mismo lo está haciendo por aquí, aunque la previsión era favorable.

Lo que lloverán serán nuestros goles :)

martes, 24 de junio de 2008

Estancia: Día Uno

Bueno, en realidad día dos, aunque ayer simplemente aterricé, y me quise morir. Habiendo dormido unas escasas cuatro horas, saliendo el vuelo a las 6:30, no llegué a Innsbruck hasta las cinco y algo de la tarde, después de un cambio de avión y un taxi-bus que me dio una vuelta por todo el Tirol...

En fin, que ayer simplemente cai rendido bajo los brazos de morfeo. Pero aunque me las prometía muy felices, resulta que mi gran ventanal con doble acristalamiento de mi habitación, deja pasar los rayos de sol que da gusto, y a eso de las 6:30 me desvelé... en fin, que me veo buscando un antifaz como PuRiRuRi.

Bueno, el caso, que me fui a la oficina tempranito en bus, no sin antes soltar pasta para comprar un bono mensual que pienso aprovechar todo lo que pueda. El campus está bastante bien, con varias cafeterías/comederos y muchos estudiantes aún (quedan dos o tres semanas de curso allí). Una vez en la oficina, mi anfitrión (que me deja solo dos semanas) me presentó a la gente que estaba por ahí, que no es mucha... se ve que el personal se lo toma con calma jejejeje.

Del trabajo poco más que decir, los que me seguís en twitter habréis visto las vistas que tengo desde mi actual sitio. Salí sobre las cinco y media con el objetivo de dar una primera vueltecita por el centro de la ciudad. Una de las primeras cosas que hay que decir es que es muy singular el estar entre dos grandes cadenas montañosas de los alpes. La ciudad está como encajonada en el valle. De hecho, según me cuentan, llegar en avión es bastante impresionante... aeropuerto que por cierto está justo al lado del campus donde está mi oficina.

Pues bien, allí que me cogí el bus y me planté en Maria-Theresa-Strasse, y vaya el tinglado que tenían montado con el rollo de la Eurocopa.


Eso no es nada... una pantalla gigante al lado del rio Inn (¿adivináis de donde viene el nombre de la ciudad?) y creo que voy a irme allí a ver el España-Rusia... y como se clasifique a la final, me voy de loco a Viena. Fijo.

Seguí mi incursión bajo el calor del atardecer por la Altstadt (ciudad vieja ;) para ver algunas de las zonas más turísticas de la ciudad, como el tejado dorado, el río Inn, o el parque Hofgarten que lo bordeé pero tengo que entrar otro día. Las vistas, por supuesto, acojonantes con las montañas de fondo. Ahí tenéis unas muestras:

El tejado dorado

El río Inn


Cuando haga una visita más concienzuda os pondré más detalles. Hoy simplemente ha sido una toma de contacto. Y mañana...

a mirar mi casillero.

domingo, 22 de junio de 2008

De camino a Innsbruck

Contando las horas en territorio nacional me hallo, mientras veo el partido de mis compatriotas. Esperemos que no sea un intercambio y me cruce en el aeropuerto a los jugadores de la selección.

Van a ser tres meses de trabajo fuera de casa. No será fácil hacerse al principio a estar lejos de los que quiero, sobre todo de mi niña. Para ella tampoco será fácil, pero sé que estará arropada por muchísima gente. La dejo en buenas manos.

Además, tenemos un nuevo integrante en nuestra recién estrenada familia. ¡¡Una cobaya!! Es mu chula, y le mola meterse en el cacharro del agua xD Ahí la tenéis en mi mano:


Aún no tiene nombre, así que se aceptan sugerencias... De hecho creo que pondremos una encuesta para que votéis el nombre que más os mola... No doy pistas aún de los que hemos pensao para que no haya favoritismos o algo :P

En fin, que nuestra cobaya (que es macho, por cierto) le hará compañia a PuRiRuRi un poco en mi ausencia. Ausencia de la que tengo grandes expectativas profesionalmente hablando, y por qué no decirlo, aprovecharé para divertirme lo que pueda. Sobre todo cuando venga a visitarme PuRiRuRi... así que tengo tres semanas para encontrar los mejores garitos de Innsbruck :D

Bueno... no se me dan bien las despedidas, creo que soy algo seco en ellas, pero os voy a echar de menos mucho a todos, en estos tres meses... Así que para que sea más corto me tendréis en el blog y en twitter dando guerra con bastante frecuencia. Publicaré las fotos que haga, y siempre que queráis me podéis llamar, que tengo la línea abierta...

Un abrazo, y nos vemos en septiembre.

lunes, 2 de junio de 2008

Desde Grecia hasta Venecia

Aquí Poseidón al habla para contar el resto de nuestra luna de miel ¬__¬

Pues PuRiRuRi nos dejó zarpando de Rodas rumbo a la isla de Mykonos, volviendo por tanto a las tan evocadoras Cícladas.

Día 4 - Mykonos

Esta vez pasamos de excursiones por recomendaciones varias que nos hicieron varios amigos que ya habían hecho este crucero. La idea inicial era alquilar un quad o similar y darse una vueltecita por la isla, pero los horarios de zarpado del barco y que al final salimos tarde de él lo impidió. Sin embargo se aprovechó bastante, ya que paseamos bastante por la capital de la isla, bastante pintoresca y llena de iglesias y recovecos.



Aquí un autóctono de la isla:


Después de pasear un poco fuimos en ferry a la isla central de las Cícladas, el Santuario de Delos, otrora una próspera ciudad, hoy un puñado de ruinas de gran valor arqueológico.


Parte de la cultura de Delos O_o (pero qué glaaandee :)


Y después de tanta vuelta y una parada para probar comida griega, volvimos al barco a la fiesta de carnaval tropical que tocaba esa noche (nótese la gomilla entre mis orejas :P ). En la foto, las parejas que compartían nuestra mesa de cena. Hicimos muy buenas migas con mexicanos y jiennenses (precisamente falta él, que hacía la foto ;)


Día 5 - Navegación

El siguiente día lo pasamos completamente en el barco, participando en un sinfín de actividades pasándolo muy bien...


... para terminar en la cena de gala con el Capitán Ilias :)


Día 6 - Dubrovnik
Después de más de un día en el mar... llegamos a la Perla del Adriático, la ciudad de Dubrovnik, en Croacia. Y en verdad que es una preciosidad de ciudad, al menos la amurallada y medieval ciudad vieja. Primero una panorámica desde el barco, con otra preciosidad al lado ;)


Un detalle de parte de la ciudad vieja desde un mirador.


Interior del Palacio del Rector.


Y ya por la noche, en el barco... nos deleitaron vista y gusto con un Buffet Magnífico lleno de obras de arte culinarias, en el sentido más estricto.




Día 7 - Venecia

Y llegamos al final de nuestro viaje, que no por ello menos interesante. La bella (aunque olorosa) ciudad de Venecia, con sus canales, sus vastos monumentos, y sus góndolas taan caras (como el resto de la ciudad, vaya). Aun así, merece mucho la pena, y quedamos encantados.

La plaza de San Marcos y su abarrotamiento.


El Puente de los Suspiros.


Una vista de la Basílica de San Marcos.



El puente Rialto desde una góndola.




Y hasta aquí llegó nuestra luna de miel. Si queréis ver más fotos, hay algunas en el álbum de fotos de picasa, una mera selección ya que el total es el triple, vídeos incluidos. Una pena que se acabara "tan pronto"... pues sin duda fue

un viaje inolvidable