Oteando el horizonte parece que nuestro velero nos ha conducido a puerto. ¿Será un buen puerto? La tripulación está ansiosa, y tiene grandes esperanzas. Atracaremos por tiempo indefinido. En cuanto nos den permiso las autoridades, desembarcaremos todo el material.
Este capitán debe mucho a la tripulación sin la cual nunca hubiera llegado. El aliento y el ánimo, junto con la comprensión por el nerviosismo propio de la travesía, se agradecen enormemente. Os debo muchas cosas, especialmente a ti.
Cuando desembarque, volveréis a tener noticias de mi... y entonces sabréis dónde he terminado. Mientras tanto, a toda vela...
¡Rumbo a la universidad!
Si no dedicas el suficiente tiempo a hacer los cálculos de astronavegación adecuados, terminarás con tus huesos en el medio de una supernova. Mide por tanto tus decisiones con cuidado, y verás como las estrellas estarán al alcance de tu mano.
miércoles, 20 de septiembre de 2006
martes, 12 de septiembre de 2006
Vientos de Cambio
Soplan vientos de cambios... Adonde me lleva el velero seguro no lo sé, pero es un paso muy importante. Da vértigo, y un poco de mareo... pero quizá el puerto de destino sea más interesante.
Cuando llegue a puerto, volveréis a oir sobre mi. Mientras tanto, esperemos que el viaje sea placentero y el viento sople a favor.
Cuando llegue a puerto, volveréis a oir sobre mi. Mientras tanto, esperemos que el viaje sea placentero y el viento sople a favor.
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