martes, 10 de octubre de 2006

25 años después

Aquí estoy, delante de una pantalla, con mis dedos sobre más de un centenar de teclas, y con toda una vida por delante. Una vida nueva, con muchos cambios, cambios que hace algún tiempo parecía imposible que ocurrieran. Y es que hace un año precisamente comenzaba con este blog, como una vía de escape a mis pensamientos más profundos, a mis aventuras y desventuras por este mundo. En una época difícil, y a la vez con tan buenos recuerdos. La amargura y la dulzura reunidas en torno a un grupo que nunca podré olvidar.

Y tanto ha pasado desde entonces... tantos cambios en mi vida, que teniendo en cuenta mi inseguridad, deberían darme vértigo, pero para nada. Creo que todo está yendo sobre ruedas... Como me decía un gran amigo este sábado, tengo muchisimas cosas con tan sólo un cuarto de siglo. Y no, no voy a contradecirle, porque tiene razón. Tengo un montón de amigos a los que aferrarme, con los que divertirme (y ellos conmigo, espero ;) , a los que debo mucho, muchísimo; una casa en ciernes que me (nos) llena de ilusiones, un trabajo recién estrenado hoy (ya he firmado!!!), un futuro prometedor por delante, una familia que me apoya en mis decisiones y me ayuda a llevarlas a cabo, y sobre todo, una personita que me lleva en volandas allá donde me dirijo. Es mi guía y mi apoyo en todos los aspectos, y aunque diga que no, le debo muchísimo.

Hemos hecho varios viajes juntos. Vamos a emprender más viajes aún (algunos si nos dejan jeje ;) . Y con mis 25 primaveras, esta nueva vida que ante mí se presenta, no ha hecho más que comenzar. Todos vosotros podéis ser partícipes de ella, estáis invitados.

Pronto acabará el día de mi cumpleaños. No me siento más viejo. Me siento feliz, ilusionado, con ganas de empezar a vivir todas estas nuevas sensaciones que me esperan a partir de ahora. Los vientos del cambio se han llevado muchas cosas, y ahora, precisamente ahora, soy joven de nuevo...

Vuelvo a nacer.

miércoles, 4 de octubre de 2006

Coloreando los sueños

Y va quedando menos. Nuestros sueños se van haciendo realidad poco a poco. Ya va quedando menos que comprar, mucho que montar aún. Y mientras tanto, damos forma a nuestros sueños, llenos de colores.



El final está a la vuelta de la esquina. Y la emoción me embarga. Está costando, pero todo llega. Al final del camino se ve la luz...

y es de colores