Esta semana ha sonado esta canción de Amaral en mi radio varias mañanas mientras iba hacia Torretriana. Y mientras la cantaba de viva voz, como si fuera el único ser en kilómetros, una emoción intensa me invadía, hasta el punto de humedecer mis ojos, que tanto sufren últimamente. Y a pesar de ello, de esa melancolía, me sentía feliz. Es un cruce extraño de sentimientos, pero así era.
Hoy quisiera recordar, a todos esos amigos que han pasado por mi vida, que están pasando, y que pasarán. Quiero dedicarles a todos ellos esta sencilla letra, que me hace emocionarme incluso ahora que escribo esto. Para aquellos con los que me crié, para los que me enseñaron lo bueno de la vida, para los que me ayudaron, para los que se fueron para siempre y nos miran desde ahí arriba (estéis donde estéis), para los que se alejaron de mi vida pero no de mi corazón, para los que rieron conmigo y me hicieron reir, para los que aún aguantan a mi lado, para los que están llegando y espero que no se vayan nunca, para los que vendrán aún, y para los que a pesar de mi forma de ser nunca me dejaron. Para todos ellos, y para los que me olvidé en el tintero, os dedico esta canción.
Marta, Sebas, Guille y los demás
Marta me llamó a las seis hora española.
Sólo para hablar, solo se sentía sola
porque Sebas se marchó de vuelta a Buenos Aires.
El dinero se acabó, ya no hay sitio para nadie.
Dónde empieza y donde acabará
el destino que nos une y que nos separará.
Yo estoy sola en el hotel, estoy viendo amanecer.
Santiago de chile se despierta entre montañas.
Aguirre toca la guitarra en la 304.
Un gato rebelde que anda medio enamorao
de la señorita rokanroll, aunque no lo ha confesado,
eso lo se yo.
Son mis amigos, en la calle pasábamos las horas.
Son mis amigos, por encima de todas las cosas.
Carlos me contó que a su hermana Isabel
la echaron del trabajo sin saber porqué.
No le dieron ni las gracias porque estaba sin contrato,
aquella misma tarde fuimos a celebrarlo.
Ya no tendrás que soportar al imbécil de tu jefe ni un minuto más.
Son mis amigos, en la calle pasábamos las horas.
Son mis amigos por encima de todas las cosas.
Son mis amigos.
Alicia fue a vivir a Barcelona y hoy ha venido a mi memoria.
Claudia tuvo un hijo y de Guille y los demás no se nada.
Son mis amigos, en la calle pasábamos las horas.
Son mis amigos, por encima de todas las cosas.
... sois mis amigos.